Desde Junio de este año comencé a investigar sobre el azafrán y encontré varios lugares donde se daba su comercialización y cultivo. El lugar que más me pareció aconsejable fue en Monreal del Campo (Teruel), donde se encuentra la empresa de Azafranes Jiloca. Allí conocí en una visita que hice a la familia que lleva generaciones cultivando el azafrán en la comarca del Jiloca.
Y aprovechando el viaje visité el Museo del Azafrán donde pude conocer la historia de esta especia así como su trabajo y dedicación de toda la gente del pueblo.
Con la llegada del mes de octubre comienza el movimiento de todos los habitantes del pueblo que ayudan cada año a la recogida de la flor. Desde los primeros rayos de luz salen todos con sus cestos a recoger el preciado tesoro que es el azafrán.
Una vez separado el azafrán de la flor se procese al tostado de el mismo, proceso que podéis apreciar en la siguiente imagen.
Y el último proceso de elaboración del azafrán es el envasado, tarea que realizan minuciosamente a mano después de pesarlo gramo por gramo. Su precio en el mercado asciende a 3.000€ el kilo (igual que las angulas)
Algún día volveremos.
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